
El alcalde de Bogotá, Enrique Peñalosa, inauguró este jueves el primer teleférico de transporte masivo en la ciudad, que trasladará a miles de personas en una barriada pobre del sur de la capital de Colombia.
«Hoy ponemos en servicio TransMiCable», indicó el alcalde en su cuenta de Twitter.
La obra, que costó 240.000 millones de pesos (más de 73 millones de dólares), movilizará hasta a 3.600 pasajeros por hora en un sentido y conectará a la empobrecida y violenta localidad de Ciudad Bolívar con la red de transporte urbano de Bogotá, informó la alcaldía en un boletín.
La ruta, cuya construcción inició en junio de 2016, tiene una extensión de 3,5 kilómetros.
Hoy ponemos en servicio TransMiCable. Lo recibimos contratado, pero con cero avance: apenas tenía 50% de los diseños, 5% de los predios. Ajustamos diseños para dar más capacidad, comunicaciones a cabinas. Y lo integramos a TransMilenio, para que pudiera usarse con misma tarjeta
— Enrique Peñalosa (@EnriquePenalosa) December 27, 2018
La estructura fue realizada por una asociación entre una firma local y la austriaco-suiza Doppelmayr, mientras que la operación y el mantenimiento estará a cargo de un consorcio en el que participa la filial chilena de la francesa Transdev.
El costo de cada viaje es de 2.300 pesos (0,70 dólares), en un país en donde el salario mínimo es de 781.242 pesos (247 dólares) y en el que más de una cuarta de parte de la población es pobre.
Anteriormente, las personas de esa localidad debían caminar o pasar largos trayectos en autobuses para llegar a sus casas.
Con un costo de 240.000 millones de pesos, el teleférico de transporte masivo es la obra de infraestructura más relevante de los últimos años en Bogotá, y moverá hasta 3.600 pasajeros por hora en cada sentido https://t.co/kSx1KN076m
— EL PAÍS América (@elpais_america) December 28, 2018
En las ciudades de Cali (suroeste), Manizales (oeste) y Medellín (noroeste), los teleféricos urbanos han participado en la integración de barriadas pobres y la reducción de la violencia.
Otras capitales latinoamericanas como Caracas, La Paz o Ciudad de México cuentan con servicios de transporte similares.