
Las barandas del puente Cáceres de Piura siguen siendo de tubo de PVC rellenas con mezcla de cemento, lo que constituye un serio riesgo para peatones, pasajeros y conductores. Así lo recordó Luis Miguel Morán Yáñez, catedrático de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Piura (UNP).
Precisamente dicha situación provocó que una camioneta, tras despistarse, cayera hace un año al río Piura y provocara la muerte de tres mujeres (Martha Vidarte de Ramírez, Bertha Ramírez Vidarte y Martha Espinoza Ramírez). Sin embargo, el trágico suceso no hizo que las autoridades tomen cartas en el asunto.
“Estamos es una ciudad donde las autoridades no existen, y estamos a merced de sus ineptitudes. Se han cambiado algunos tramos de las barandas, pero el resto sigue siendo de PVC y por lo tanto un riesgo para quienes lo usamos. Seguimos con esa bomba de tiempo y trampa mortal”, consideró Morán Yáñez.
Abuela, madre e hija son las víctimas de camioneta que cayó al río Piura
Explicó que las barandas son precisamente para dar seguridad a los peatones y para servir de contención ante un posible despiste de un vehículo, y por lo tanto deberían ser de un material muy resistente, que puede ser acero u otro similar.
“La función de una baranda en un puente es contener un vehículo y recobre su dirección. Principalmente debe ser de acero para que resista un eventual choque”, añadió.
Asimismo, reiteró la urgente necesidad de inspeccionar cada uno de los puentes e iniciar un plan de mantenimiento integral para garantizar la seguridad de las personas.